En lo invisible

Llevas toda la vida ahí... Hubo una época en la que no era consciente de nada: aquella época de veranos eternos, creencias imposibles, mundos que crear una tarde con pan y chocolate... La realidad estaba dormida, anestesiada... Los años pasaron. Los sueños se transformaron. Despertaron tantas y tantas cosas...como si del juego del dominó se tratara, comenzaron a caer las fichas...el efecto mariposa...
Estás ahí, acechándome, me asusta tu existencia... Aún no has vencido a mis sueños, pero te tengo miedo. Pienso que volverás a aparecer como tantas veces, te reirás de mi, y tendré que volver a empezar. Y sabes que ya me cansa tanto, aunque no me tumbes y me tambalees...
Me pregunto si la culpa será mía, por creer en lo increíble, en lo que nadie cree... El estúpido soñador que cree en castillos de arena levantados en las nubes de algodón...
Estoy asustado, me hago el fuerte y me río llorando... Cada vez me cuesta más creer en algo. No he dejado de creer, de creer en mis sueños, pero.... ojalá te fueras de mi lado. Y si no fuera posible, no me rozaras. ¿Que será de mi con el paso de los años? Me estremezco por dentro, se encoge mi estómago pensando que horrible será todo, si al final eres tú lo único que queda a mi lado. Porque tenerte es no tener nada. Porque se que disfrutarías viéndome llorar como un niño agarrado a una caja grande de metal donde se encierren los momentos de felicidad, algunos efímeros, otros con cierta duración...pero todos proyectos inacabados: subir y bajar, levantarse y caer...
Nunca me caíste bien. Me destrozas por dentro, cuando te siento. Creo que me amenazas...me haces llorar...me haces vivirlo todo con miedo, temeroso, midiendo las palabras, asustando a mis sentimientos... llenando de negatividad mi vida... Sé que eres real, que no soy el único a quien persigues...pero sabes de mí demasiado, sabes que me haces daño...
No puedes ganarme...seguiré luchando... en mitad de la niebla que te hace invisible